miércoles, 28 de octubre de 2015

Una nueva perspectiva

Supongamos que queremos hacer una lista de los mejores creativos de la historia ¿Qué nombres se os vienen en primer lugar a la cabeza? Pensadlo un momento.
¿Ya?
Apostaría que en esa lista que acabas de hacer se encuentra el nombre de un pintor español, más concretamente malagueño, innovador, vanguardista…si me refiero a Pablo Ruiz Picasso. ¿Qué no lo habías pensado? ¿No estaba en tu lista? Entonces es el momento de incluirle ¿Por qué? Por esto:


 
Las señoritas de Aviñón (Picasso, 1907)



Mujer llorando (Pablo Picasso, 1937)

Picasso fue uno de los precursores del movimiento vanguardista del Cubismo. El Cubismo rompió  con definitivamente con la pintura tradicional del momento. Los pintores cubistas, entre los que además de Picasso se encontraban Juan Gris y Braque, entre otros, se dieron cuenta de que ya existía un medio que permitía mostrar la realidad tal cual era, la fotografía, por lo que ellos se propusieron mostrar una realidad totalmente diferente. Esto encajaba totalmente con el espíritu que se estaba creando a principios del siglo XX, esa ansia por lo nuevo, esa casi necesidad de romper con los modelos del pasado. El cubismo acaba con la pintura tradicional y con la perspectiva adoptada del renacimiento. Adopta una perspectiva diferente, la denominada “perspectiva múltiple” ¿en qué consiste esta perspectiva? En representar todas las partes de un objeto en un mismo plano. Así, por ejemplo, podemos ver en un retrato a la vez los ojos desde un rostro de frente y la nariz desde el perfil. Además de esta peculiaridad otra sería el uso de las formas geométricas para representar las formas de la naturaleza, simplificándolas y reduciéndolas a estas. Este interés por la geometría ya se había visto anteriormente en la obra de otros autores, como en la de los puntillistas Signac y Seurat, también vemos la influencia de Cézane en la simplificación de las formas e incluso los motivos que se utilizan para ser pintados ya se habían utilizado antes, se siguen haciendo retratos, bodegones y paisajes. Pero la mente creativa de Picasso y de los pintores cubistas no se queda tan solo con esos elementos, sino que les da un sentido nuevo, crean una imagen propia, un tipo de pintura totalmente diferente y novedosa; dan autonomía al cuadro frente al objeto que representa, la pintura es ahora algo en sí mismo indiferentemente de lo representado. Esta nueva forma de representación trae consigo una mayor implicación por parte del espectador, ahora no nos vale solo con mirarla y observarla, necesitamos hacer una reconstrucción mental de las diferentes partes y planos que se muestran para interpretar que es lo que se está representando. 
 Mujer con guitarra (Braque,1913)

Imagina lo que supondría para la gente de la época observar por primera vez este gran cambio en la pintura, este gran cambio en la manera de observar una obra de arte. Acostumbrados a ver las representaciones tan fieles a la realidad ahora Picasso y los cubistas les pedían cambiar totalmente su mirada, requería de su esfuerzo. Pongámonos en su lugar, seguro que a nosotros también nos costaría. Reflexiona ¿Cuál sería tu reacción? ¿Aceptarías y disfrutarías de este gran cambio desde un primer momento? O ¿necesitarías tu tiempo?
Para acercar el cubismo a nuestra época os dejo esta imagen creada por el estudio wonderbros con la que tratan simular como sería algunos personajes de comic si hubiesen sido dibujados por Picasso.